Uno de los motivos por los que Kim Kardashian se animó a crear su propia marca de ropa interior moldeadora era que ella nunca encontraba prendas reductoras que pudieran camuflarse con facilidad bajo los reveladores atuendos que suele lucir. Al final, siempre acababa teniendo que customizarlas, cortando por ejemplo una pernera de las fajas para utilizarlas con los vestidos que incluyen una vertiginosa abertura.
Su idea de poner a disposición del público este tipo de diseños ha sido todo un éxito y la celebridad sigue ampliando su clientela potencial. Tras presentar una línea pensada especialmente para el embarazo y el posparto, que generó cierta polémica, ahora se ha propuesto conquistar el rentable mercado de las bodas. Ella misma lució para su enlace con Kanye West una ajustadísima creación de Riccardo Tisci con una espalda transparente, que sin duda le pondría las cosas muy difíciles para encontrar una lencería adecuada.
Kim ha anunciado que este viernes saldrá a la venta una colección creada específicamente para novias, que les permitirá cumplir la tradición de llevar 'algo azul' en su gran día de la forma más práctica posible gracias a los dos colores en que está disponible: el clásico blanco y un nuevo tono azul pastel. Las prendas que engloba son básicamente sus productos estrellas: un body reductor, un sujetador sin aro, un pantalón tipo faja y ropa interior de talle alto.
La única novedad es una bata de seda de edición limitada que cuesta 148 dólares.
FUENTE: SHOWBIZ