El ejército iraquí envió refuerzos para auxiliar a las tropas en Ramadi, una ciudad que está mayormente ocupada por el grupo extremista Estado Islámico luego de ser tomada el viernes, señaló un vocero del ejército de Irak. 1v5k50
El vocero del Comando de Operaciones Conjuntas, el brigadier general Saad Maan, dijo a la televisión estatal que la coalición liderada por Estados Unidos apoyaba a las tropas iraquíes con "dolorosos" ataques aéreos desde la tarde del viernes.
Ibrahim no dio detalles de los combates en curso, pero describió como "positiva" la situación en tierra y prometió que el grupo Estado Islámico será expulsado de la ciudad "en las próximas horas".
El viernes, los extremistas tomaron Ramadi, la capital de la provincia de Anbar, lanzando una ofensiva coordinada que incluyó tres ataques prácticamente simultáneos de autos bomba. Los combatientes tomaron los cuarteles centrales del gobierno y otras partes estratégicas de la ciudad.
Autoridades locales señalaron que murieron decenas de fuerzas de seguridad y civiles, en particular, familiares de las tropas, incluyendo 10 agentes de policía y 30 soldados tribales aliados a las fuerzas iraquíes.
En una muestra de cómo la más reciente ofensiva preocupaba a Washington, el vicepresidente Joe Biden y el premier iraquí Haider Al-Abadi, prometieron el viernes la entrega de artillería pesada, incluyendo lanza cohetes AT-4 para contrarrestar los atentados suicidas con autos bomba, de acuerdo a un comunicado de la embajada estadounidense.
El documento también asegura que ambos líderes acordaron "la importancia y urgencia de movilizar a los combatientes tribales que trabajan en coordinación con las fuerzas de seguridad iraquí para contrarrestar al Estado Islámico y asegurar la unidad de esfuerzo entre todas las comunidades del país".