El Ministerio de Defensa surcoreano informó hoy de que Corea del Norte disparó a un funcionario sureño desaparecido esta semana en la frontera entre ambos países y que incineró su cuerpo, un acto que ha calificado de "brutal" y por el cual ha exigido explicaciones a Pionyang.
El funcionario, de 47 años e identificado solo como "A", desapareció el pasado lunes cuando estaba a bordo de un barco del Ministerio de Pesca que se encontraba en ese momento a unos 10 kilómetros de la frontera marítima occidental, la tensa y disputada Línea Límite Norte (LLN).
Tropas norcoreanas "hallaron al hombre en sus aguas y cometieron un acto brutal al dispararle e incinerar su cuerpo, según el exhaustivo análisis militar que hemos hecho de varios datos de inteligencia", explicó el Ministerio en un comunicado.
"Nuestro ejército condena con dureza semejante acto brutal y urge al Norte a ofrecer una explicación y a castigar a aquellos responsables. También advertimos a Corea del Norte de que toda responsabilidad sobre este incidente recae sobre ellos", añade el texto.
Es la primera vez que un civil surcoreano muere a manos del ejército norcoreano desde noviembre de 2010, cuando un bombardeo norteño sobre la isla de Yeonpyeong, justamente en la misma zona donde desapareció el funcionario, costó la vida a dos habitantes de la isla y a dos soldados.
Antes de eso, en julio de 2008 soldados del Ejército Popular de Corea (KPA) mataron a tiros a una sureña que estaba realizando una visita turística al complejo turístico norteño del Monte Kumgang y que aparentemente entró en una zona militar restringida.
Según la inteligencia analizada por Seúl, una patrulla marítima norcoreana encontró un día después de su desaparición a la deriva al funcionario, que llevaba un chaleco salvavidas y estaba agarrado a un objeto flotante, y lo subió a bordo.
Al parecer el hombre fue interrogado por personal que usaba "máscara antigás" y horas después, "tras una orden superior", fue ejecutado y su cadáver, tras ser rociado con combustible, fue incinerado a bordo, dijo en rueda de prensa el responsable de operaciones del Estado Mayor Conjunto (JCS) surcoreano, Ahn Young-ho.
Se cree que la brutal ejecución puede responder a las medidas de Corea del Norte, que ha cerrado fronteras a cal y canto desde el inicio de la pandemia para combatir la COVID-19.
Ahn añadió que "A", del que solo se encontraron sus zapatos a bordo del buque del Ministerio de Pesca, aparentemente tenía intención de desertar al Norte.
También indicó que el Sur ha tratado sin éxito de ponerse en o con el Norte en relación con este caso, que promete volver a incrementar la tensión en la península.
FUENTE: EFE