El diputado Rubén De León, presidente de la Asamblea Nacional presentó su discurso de rendición de cuentas al iniciar la segunda mitad de su periodo al frente del legislativo. 193i60
Dijo estar convencido de la necesidad de rendir cuentas a la sociedad y destacó algunos de los hitos de la primera legislatura del segundo periodo de sesiones ordinarias.
Pero, el diputado no dejó pasar la oportunidad para hacer referencia a hechos que empañan el actuar de los diputados como las discusiones y violencia, pues dice creer en el debate profundo “pero sin ofender con palabras o con gestos que al final deterioran la imagen de todos”
“Nuestra institución representa el centro del debate nacional. Y como es natural, en los debates existe la contradicción, el enfrentamiento, pero nuestros ciudadanos no conciben que este escenario sea construido para insultos y el irrespeto”, manifestó.
A pesar de algunas faltas, el presidente de la Asamblea ponderó la aprobación de 33 proyectos de ley, la asistencia de los diputados que fue de 66% a nivel de comisiones y de 65% a nivel del pleno que representan al menos 900 horas de trabajo entre comisiones y plenarias.
“Sinceramente, creo que estas cifras pueden mejorar en esta segunda legislatura, porque la Asamblea es observada, por la sociedad, y por los medios y son nuestros actos lo que le darán el prestigio necesario para que aumente la confianza en su trabajo y proyección” dijo De León.
Durante ese periodo, destacó el trabajo de la Comisiones en las cuales se realizaron 240 reuniones, 30 giras, 292 traslados de partida, 85 vistas presupuestarias y 10 comparecencias diplomáticas.
Reiteró su compromiso para que se propicie durante esta legislatura, un debate para la modificación del Código Electoral y la elección de un nuevo Defensor del Pueblo.
FUENTE: Irma Rodríguez Reyes