En las últimas semanas, al menos 1,500 drones han sido detectados mientras intentaban introducir artículos prohibidos en las cárceles de Panamá, según informó el Ministro de Gobierno, Roger Tejada. Este alarmante aumento en el uso de drones para actividades delictivas ha generado preocupación en las autoridades, quienes están intensificando las medidas para combatir este tipo de prácticas.
Los drones han sido utilizados como herramientas para el contrabando de artículos prohibidos, poniendo de manifiesto la adaptación de métodos por parte de individuos vinculados a la delincuencia. El ministro de Gobierno destacó la importancia de abordar este problema de manera urgente para mantener la seguridad y el orden dentro de las instituciones carcelarias.
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Las autoridades están implementando estrategias para contrarrestar esta tendencia, utilizando tecnología avanzada y reforzando la vigilancia en áreas críticas. Además, se están evaluando medidas adicionales para prevenir la entrada de artículos prohibidos mediante drones y garantizar la integridad del sistema penitenciario.
El uso de drones para actividades ilegales representa un desafío significativo, y las autoridades están trabajando en estrecha colaboración para desarrollar soluciones efectivas que disuadan estas prácticas y fortalezcan la seguridad en las cárceles del país.