El Servicio Nacional de Migración (SNM) de Panamá aclaró que no tiene “relación o nexo alguno” con la venta de boletos aéreos a los migrantes venezolanos que se encuentran en el albergue habilitado en Viejo Veranillo.
“Esa es una gestión que está realizando la Embajada de Venezuela en Panamá, la cual se maneja directamente entre esta representación diplomática y las agencias de viajes que an”, detalló la entidad en un comunicado.
La venta de los pasajes aéreos en el refugio habilitado para alojar a migrantes irregulares, son dirigidas por la misión diplomática venezolana, explicó el SNM. “Las aerolíneas interesadas en vender estos pasajes, acuden al refugio con el visto bueno de la embajada del país sudamericano”.
Según SNM, se han dado donaciones por parte de organizaciones religiosas o personas privadas, las cuales son gestionadas de forma directa entre los donantes y las aerolíneas.
“El Servicio Nacional de Migración colabora con el traslado de estas personas en forma gratuita, hacia el aeropuerto de Tocumen, para que aborden el vuelo de retorno voluntario con destino a su país”.
Panamá es un país de tránsito para cientos de miles de migrantes de Venezuela y otros países que buscan llegar a Estados Unidos.
Ante el anuncio hecho por el Gobierno de EE. UU. miles de venezolanos irregulares han quedado varados en Panamá, y otros países, y han solicitado que se gestionen vuelos humanitarios para retornar a Venezuela.
La Misión de Venezuela en Panamá está ayudando a coordinar vuelos, cuyos costos deben ser cubiertos por los propios migrantes, muchos de los cuales no cuentan con los 280 dólares que cuesta el pasaje por persona.