El Tribunal de Juicio dio lectura este miércoles de la sentencia a los responsables por el homicidio de 7 jóvenes en un área boscosa de Espinar, en la provincia de Colón, adjudicando a Jean Carlos Hernández, alias "Niñito", la pena de 36 años de cárcel, y a Reynaldo Cuadra, alias "Monstruo", la condena de 50 años en prisión.
Los jueces Manuel Quijada (presidente), Yiria Soto (relatora) y Felipe Waisome, el pasado 15 de diciembre concluyeron la culpabilidad de los dos acusados considerando que se daba la existencia de elementos que los hicieron partícipes de la comisión de los delitos contra la vida y la integridad personal (homicidio doloso agravado), femicidio, contra el patrimonio económico (robo agravado) y contra la libertad e integridad personal (secuestro).
La decisión condenatoria por parte de los jueces se dio luego de un análisis de un total de 28 elementos probatorios y 10 testimonios que fueron presentados por el Ministerio Público durante el anticipo de pruebas, además del compendio probatorio de los representantes legales que consistió en 8 pruebas.
La lectura de sentencia de este 29 de diciembre se dio a las 2:00 p.m. en las instalaciones del Sistema Penal Acusatorio de Colón.
Tras la lectura de la sentencia los familiares de los jóvenes asesinados se mostraron algo decepcionados y manifestaron su descontento con las penas impuestas, en vista de que solicitaban la máxina condena para los dos autores y que ambos pagaran igual cantidad de años en la cárcel. Hay que destacar que la Fiscalía solicitaba la pena de 72 años de cárcel para los condenados.
Los hechos: El homicidio ocurrió el 17 de julio de 2020
El asesinato de estos 7 jóvenes ocurrió el 17 de julio de 2020, y al hecho se le denominó como la "Masacre del Búnker" de Colón.
Los eventos se suscitaron cuando un grupo de 13 jóvenes se trasladó, en medio de la pandemia de COVID-19 y las medidas de restricciones impuestas por las autoridades, al lago Gatún para tener un día de esparcimiento en medio del encierro; y estando en este boscoso sector los dos condenados llegaron con un arma de fuego e intimidaron a los muchachos, despojándolos de sus artículos personales y conduciendo a algunos de ellos hacia el búnker de este sector, donde posteriormente les dispararon. Hay que destacar que los otros 6 jóvenes sobrevivientes, tras ser asaltados fueron desviados a otro camino, al salir del área posteriormente narraron a las autoridades parte de lo sucedido.
Los jóvenes que perdieron sus vidas ese fatídico 17 de julio oscilaban entre los 15 y 22 años, residían en los sectores de Villa del Caribe, Valle Verde y Puerto Escondido, corregimiento de San Cristóbal, provincia de Colón, estudiaban y mantenían sueños de superación.